El exjugador de Deportivo Madryn, Leandro Dómini, jugó el tristemente célebre partido entre Independiente y Deportivo Roca. "Lo que realmente ocurrió lo saben Artaza y Murúa", dijo el zaguero del "Rojo". La investigación sobre el rol del "Pity" avanza.
El histórico fallo que envió a Deportivo Roca al descenso por arreglo de partido con Independiente de Neuquén en el Federal A sigue arrojando repercusiones. Leandro Dómini, zaguero del "Rojo" con pasado en Deportivo Madryn, dialogó con Jornada sobre la situación. "Mojarra", tal como se lo apoda, jugó el encuentro en cuestión el pasado 24 de marzo.
"Salpicados"
El Tribunal de Disciplina Deportiva del Interior determinó que la inclusión del sancionado Joan Artaza en el encuentro ante el "Naranja" fue deliberada. A entender del TDI, el propósito buscado por la acción era que el elenco rionegrino pudiera ganar los puntos a como diera lugar para forzar un desempate para no descender.
"Sinceramente no tenía idea yo de la expulsión de Artaza. No viajé a General Pico a jugar el partido donde lo expulsan, el anterior. Ni escuché el partido. Ni bien terminó el partido con Roca me llama el DT de Madryn y me dice: 'Qué cagada (sic) se mandaron. Pusieron un expulsado''. Y ahí me enteré. Un papelón", describió el defensor. Dómini asume que la situación es inverosímil. "¿Sabés cuantos amigos de fútbol me han llamado y me dicen que es para dudar. Y en menor o mayor medida todos quedamos salpicados", detalló el futbolista, campeón del Argentino B con Deportivo Madryn en 2014. "Según dicen los chicos, le dijeron al DT que Artaza no podía jugar. Dicen que les dijeron que en el boletín no había salido nada y que podía jugar. La realidad es que uno habiendo sido expulsado tiene que saber que mínimamente una fecha te toca de suspensión", agregó el defensor. Dómini considera que no hubo malicia, pese al fallo del Tribunal de Disciplina. "Da para pensar que estaba arreglado porque un error así es infantil pero te aseguro que jamás hubo un mensaje o alguna situación que haga pensar que había algo ya acordado. Para mí, fue una fatalidad. Un olvido", indicó. "Yo pienso que si querían arreglar seguro que hay otras formas y no esta. Me cuesta pensar que fue otra cosa que un olvido o un descuido. Muy estúpido pero sin mala intención fue todo. El plantel salió a ganar, pese a que implicaba eso el descenso de otros", dijo. "Ahora lo que sucedió realmente lo saben el DT y el jugador", concluyó.
El proceso
El "Pity" debía presentarse ayer a dar testimonio ante el Tribunal del Consejo Federal. Según trascendió, lo hará dentro de diez días. En tanto, Joan Artaza y Gastón Sobisch, presidente de Independiente, deben hacerlo mañana. Este último declarará en condición de representante legal del "Rojo". De no mediar inconvenientes, el fallo complementario se emitirá la próxima semana. Ambos protagonistas, Murúa y Artaza, están expuestos a sanciones de cinco años de suspensión como máximo, según lo previsto en los artículos 260 y 287 del Reglamento de Transgresiones y Penas.