Central Córdoba trabajó por la mañana y se relacionó con lo estrictamente físico con vistas al cotejo del domingo desde las 17 ante Central Norte en el “Padre Martearena” de Salta por la 2ª fecha del torneo Argentino A. El plantel se movió con un grupo reducido teniendo en cuenta que los jugadores de la Primera local no estuvieron presentes, ya que por la tarde jugaban ante el IDS por una nueva fecha del Anual 2013. De todas maneras el entrenador Salvador Ragusa ordenó un trabajo físico con tareas regenerativas teniendo en cuenta del largo viaje que significó el regreso desde Concepción del Uruguay, tras la derrota ante Gimnasia. La buena noticia fue que el plantel terminó el juego con el “lobo” sin lesionados, ya que tanto Víctor Beraldi como Héctor Arrigo, que en la semana pasada estuvieron trabajando en forma diferenciada por sendas contracturas, estuvieron practicando con total normalidad en la jornada de ayer. La mala noticia fue que el defensor Diego Villagra tuvo que armar sus valijas para volverse a la ciudad cordobesa de Villa María, ya que Alumni, club dueño de su pase, le puso trabas y fue el desencadenante para que el jugador no pueda jugar para Central Córdoba a la presente temporada, teniendo en cuenta que había llegado al Oeste como uno de los refuerzos. La historia es particular porque cuando el jugador fue tentado para venir a jugar a Central Córdoba, había manifestado que era jugador libre, sin embargo con el transcurrir de los días y con el lateral por izquierda ya confirmado como refuerzo “ferroviario”, apareció Alumni de Villa María en acción y pidió el regreso del jugador porque aclaró que pertenecía a esa entidad, algo que sorprendió a todos en el Oeste. T ras las averiguaciones pertinentes, se confirmó que Villagra era jugador de Alumni por lo que finalmente la entidad “ferroviaria” decidió no sumar al jugador. Ayer pasó por la práctica matutina a despedirse de sus compañeros.
