El DT y los jugadores de Atlético responsabilizaron al árbitro por la derrota del equipo. La zona mixta del estadio Monumental era una olla a presión. Los errores de Andrés Merlos alteraron la calma en un vestuario local que no encontraba remedio capaz de apaciguar el dolor por la derrota. El hombre de negro -esta vez vestido de verde- fue el único blanco de las críticas. Fue el mayor culpable (no el único) de un nuevo paso en falso de Atlético en el torneo. "No me gusta hablar de los árbitros pero, lamentablemente, no puedo dejar pasar esto. Fueron muchos errores juntos. Nos metieron dos goles en off side. Así se hace muy difícil", aseguró Ricardo Rodríguez, quien fue más allá. "Hay muchos clubes grandes de Buenos Aires que están debajo de nosotros en la tabla. Por eso es posible que nos estén perjudicando. No es el primer partido que nos pasa esto". A "RR" se lo notaba cansado, abatido. Conocedor de los sub mundos del fútbol criollo, sabe que estando a más de 1.200 kilómetros de donde se corta el queso, el panorama se hace más oscuro. "Yo dirigí en Buenos Aires y sé que a los clubes del interior no los quieren. Nuestros dirigentes deben tomar cartas en el asunto para que no sigamos sufriendo malos arbitrajes", subrayó. Diego Barrado, otro de los que destilaba furia, fue contundente. "El juez cometió errores muy groseros que sentenciaron nuestra suerte. Hicimos un gran partido, pero sus fallos nos dejaron sin nada", afirmó el "Pensador", que piensa que deben evitar hablar de los hombres de negro para no sufrir represalias. "Está clarísimo. En Junín criticamos al árbitro y ahora nos tocó esto. Da a pensar, ¿no te parece?", buscó la complicidad del cronista. A pesar de la impotencia, el volante prefirió mirar la mitad del vaso llena. "Me voy muy contento porque jugamos un gran partido. Debemos seguir así, las victorias ya comenzarán a aparecer", confió sin dudarlo el volante. El golpe fue duro pero en 25 de Mayo y Chile nadie piensa en bajar la guardia. Ya quieren revancha.
