Fue 1-1 en Santa Inés en una nueva presentación en la tercera categoría del fútbol argentino con los tantos del interminable Ernesto "Pinti" Álvarez y Maximiliano Solari.
El equipo misionero volvió a mostrar más garra que juego pero no pudo batir a su par correntino. Fue 1-1 en Santa Inés en una nueva presentación en la tercera categoría del fútbol argentino con los tantos del interminable Ernesto "Pinti" Álvarez y Maximiliano Solari.
En un primer tiempo de acciones cambiantes fue el Colectivero quien pegó primero. Sobre los 3’ el eterno goleador conectó de aire un centro perfecto de Abel Méndez, desde la esquina derecha, para ejecutar en el área chica y concretar el prematuro 1-0.
La euforia tomó por sorpresa al público presente en las gradas del Andrés Guacurarí y fue la inyección necesaria para ejecutar el plan previo. Pero muy por el contrario a lo que se esperaba, Crucero cedió la pelota y poco a poco el protagonismo del partido.
En este contexto Boca Unidos se hizo cargo de la situación intentando armar juego en los pies de Federico Pérez y Mariano Del Col. Los de Dechat, en tanto, decidieron aguardar alguna contra con la presión en la zona media. Un grueso error que lo terminó pagando caro.
Pisando los 30', y en una de los tantas arremetidas aurirrojas, el goleador Maxi Solari aprovechó una desatención defensiva en el área chica para acomodar su cuerpo y direccionar sutilmente el esférico al fondo de la red. El efecto del cabezazo fue suficiente para desdibujar a un arquero que se confió y vio cómo la pelota ingresó mansamente al lado de su palo derecho.
Sin dudas fue un mazazo, pero hay que sostener que el Colectivero se fue pinchando con el correr de los minutos.
Ya en el complemento el comando técnico movió las piezas con tres cambios de movida y los ingresos de Nicolás Fassino, Lautaro Soto y Del Solé. La misión: recuperar el dinamismo y la movilidad.
Parecía que el destino le guiñaba un ojo al Colectivero después de la expulsión de Del Col a los 5' luego de un infantil manotazo a Soto en plena carrera. Pero esa ilusión poco a poco se fue apagando a pesar de algunas jugadas claras como la palomita de Pinti a los 12’ o el penal no sancionado por el colegiado sobre Fassino nueve minutos más tarde.
El partidose volvió físico y trabajo, negocio redondo para los de Pipa Estévez que hasta lo pudieron ganar a los 32' cuando el ingresado Abecasis falló un mano a mano con el arquero aprovechando un fallo garrafal de Portillo.
La roja a Fassino a los 37' por doble amarilla fue el condimento que faltaba a este escenario de incertidumbre total. Y párrafo aparte para el pibe Eduardo Bogarín que terminó siendo el valor más desequilibrante con su ingreso más que grato.
Los minutos finales fueron de empuje en un ambiente tenso pero redituable. No fue suficiente.
Esta tarde Crucero quedó nuevamente en deuda en Santa Inés y la primera victoria en el torneo se hace esperar. En la próxima fecha, la quinta, visitará a Sol de América de Formosa. Esa será otra oportunidad.