Luis Vila marcó de cabeza en la primera que tocó e inició la acción que derivó en el 2-0 final, que le permite al aurinegro mantener la ventaja sobre Villa Mitre, que también ganó por la fecha 23 de la Zona 1 del Federal A.
Olimpo mantuvo la calma hasta divisar el horizonte, monopolizó el balón todo lo que quiso y, pese a las interferencias en el juego asociado y a los bloques defensivos que le plantó en cancha su rival, le ganó con autoridad y justicia divina 2-0 a Sansinena.
Con el 4-1-4-1 del cerrense encima, el aurinegro trató de hacer correr la redonda de lado a lado, porque en el medio sabía que caía en el embudo visitante donde se le licuaban todas las ideas.
Alguna disparada de Gutiérrez, ciertas combinaciones positivas cuando escalaron los laterales y la pegada de Ramírez fueron los argumentos, débiles y esporádicos, del dueño de casa para derribar el muro de un contrincante que apostó a la fricción y doblegó esfuerzos en las marcas. Por más que Santángelo y Agüero intentaron romper como extremos, los dirigidos por Seba Polla hicieron lo que pudieron en zona ofensiva.
Cuando Marcos Hermann salió lesionado y el de Cerri quedó sin 9, la pregunta surgió al instante: ¿Olimpo va a mantener a los cuatro del fondo? Por momentos eran defensores que se querían adelantar todo lo que podían contra volantes voluntariosos que se alejaban cada vez más de la vista de Champagne.
Pero este Olimpo cuenta con numerosas variantes y, como le sobra jerarquía, puede pedir un préstamo en el banco para convertir en oro todo aquello que parecía gris chapa.
En la primera que tocó, el "Tanque" Vila aplastó a Sansinena. El de Tornquist cabeceó solo un centro de Ramírez y el ejército albirrojo quedó hecho cenizas.
El campo quedó despejado para el segundo, obra de Aldo Araujo -- volvió al gol tras un año y medio--, y para un final que estaba cantado si el que abría el marcador era el elenco olimpiense.
Era 0-0 o ganaba el que más opciones ensayó en búsqueda de una victoria que encontró con relevos que tuvieron pasado en Primera división. Más clarito… Si querés echale agua, pero ganó el que tenía que ganar.