Quilmes volvió al trabajo este martes por la mañana en el anexo, donde hizo trabajos físicos para los que fueron titulares ante Los Andes (que hicieron pasadas y ejercicios de coordinación), y fútbol en espacios reducidos para los suplentes (se enfrentaron dos equipos de siete).
Maximiliano Padilla trabajó a la par de sus compañeros en el fútbol reducido, recuperado de la molestia que padecía en la rodilla derecha, y está a disposición del entrenador Sergio Rondina para el partido del próximo sábado como visitante frente a San Miguel (desde las 15.30).
Por otra parte, se entrenaron de manera diferenciada Camilo Machado (tareas físicas intensas en el anexo por una distensión muscular, llegaría bien), Leonel Vangioni (también tiene una distensión, trabajó más liviano y no llegaría), Francisco Flores (traumatismo en el posterior derecho, está en duda, hizo kinesiología) y Julián Gurzi (también kinesiología, operado de la rotura de ligamentos de la rodilla derecha).
No estuvieron en la práctica Lautaro Herrera, Bautista Stábile, Tiago Marghetich ni Gabriel Vázquez, porque se entrenaron con la Reserva.
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