Sportivo Italiano lo ganó en la última, de visitante, y con un hombre menos, todos agravantes para estrenar la victoria en la temporada
Limpiese la mufa Italiano, y festeje la primer victoria del año. Sí, así es. Doce partidos sin poder ganar, y en el número 13 —irónicamente— selló sus primeros tres puntos. Con todos los condicionantes, con viento en contra, y con un Merlo energizado por el empate de Zeineddin, la ganó en la última. Cómo tantas veces lo sufrió en el año.
Con el aluvión de Merlo luego del empate, El Tano parecía condenado a repetir la historia, a repetir otra vez una derrota desafortunada e inmerecida. La diferencia es que hoy apareció una bruja para romper la maldición.
Esta no volaba en escoba, aunque sí voló entre el 2 y el 4 de Merlo para marcar el tanto. Tampoco tenía un caldero mágico, sino más bien una simple receta: una hermosa gambeta de Torres para sacarse la doble marca en mitad de cancha, luego un pase para Facundo Gómez —la bruja— que figuraba entre líneas enemigas, y que finalmente esta hiciera su magia con un sutil toque al balón para pellizcarlo y picarsela al arquero despavorido.
Fue el moño, el sello para cerrar la victoria que había conseguido el tanto tempranero de Emilio Porro. Todo esto frente a un Merlo deslucido, que jugaba de local y a sabiendas que, en caso de ganar, podía acomodarse en un privilegiado segundo puesto.
A pesar de esa gran oportunidad, Merlo fue un equipo sin ideas y sin ocasiones claras de gol. Con un jugador más durante casi la totalidad del segundo tiempo, debido al topetazo y expulsión por doble amarilla de Daivez sobre Aguerre, Deportivo pasó de estar al borde de la victoria con el aluvión post conversión de Zeineddin, a quedarse con las manos vacías.
La misma situación que tanto sufrió Italiano, pero esta vez lo vivió desde la vereda de enfrente. El Tano asediado, siendo avasallado por los centros —aunque no llegadas claras— de Merlo. En inferioridad numérica y lejos de su casa. Enfrente, un equipo revitalizado, que transitaba su mejor pasar de los 90 minutos, y que parecía destinado a llevarse la victoria, pero se queda a las puertas de todo y sin nada. Lo que protagonizó en carne propia Sportivo Italiano a lo largo de este Apertura, hoy lo vivió del otro lado. Rompió su maldición, el destino quería que fuera en uno de los partidos en los que menos merecía, y lamentablemente Deportivo sufrió el daño colateral en esa quita de mufa italiana.
Deportivo Merlo se estanca con 19 puntos en el décimo lugar, y deberá revindicarse frente a UAI Urquiza por la próxima fecha. Por otro lado, Sportivo Italiano escapa momentáneamente del descenso, y compromete a Fénix y Sacachispas. Buscará mantener el camino de la victoria y avanzar en la carrera por mantener la categoría en sus tierras y frente al antes mencionado Saca, por la fecha número 15 del Apertura de La Primera "B" Metropolitana.