De Muner aceptó regresar a La Ciudadela ciego, para sacarse la espina y ayudar al "santo"
Las vueltas de la vida siempre dan la oportunidad de revertir la historia, de reivindicarse. Leandro De Muner puede dar fe de ello. Su anterior paso por La Ciudadela le había dejado un sabor amargo, uno que le costó digerir. Y claro, el descenso a este infierno llamado Argentino A y su posterior alejamiento lo dejó nocaut, con ganas de buscar revancha. Pero Pedro Monzón, el DT de San Martín por aquellos tiempos, le bajó el pulgar y él debió buscar nuevos horizontes.
Pero dos años después se topó ante la oportunidad de sacarse la mufa. "Es una revancha para mí. Vengo con la ilusión de devolver a San Martín al lugar que se merece", dijo "Lea", tras su segundo entrenamiento en el club que aprendió a querer, a pesar de que su paso (temporada 2010/11) fue breve.
"Me había sentido muy cómodo tanto en La Ciudadela como en la provincia. Por eso cuando me llamaron para volver, no lo dudé un instante. Conozco lo que es San Martín y cómo piensa su gente", explicó el volante sabiendo que en un año se jugará la vida. Pero él no le esquiva al bulto: "es un lindo desafío tener la responsabilidad de lograr el ascenso con este club. Entrar en la historia de un grande como San Martín sería algo impagable".
Luego de casi tres años cargados de turbulencias, donde la institución no terminaba de salir de un problema que ya aparecía el siguiente, el club parece comenzar a estabilizarse. Algo fundamental para aspirar en grande. "Siempre es importante que todas las patas estén bien firmes para lograr cosas importantes. Por lo que me dijeron el club se está acomodando en todos los aspectos; además se está formando un gran grupo. Todo está listo para que podamos pensar en grande. Con el aporte de jugadores, cuerpo técnico, dirigentes e hinchas; creo que vamos a lograr el ascenso", se ilusionó el hombre que viene de jugar para Acassuso en la Primera B Metropolitana.
La pretemporada está ingresando en la etapa más importante, la del acondicionamiento físico; esa que tanto fastidia a los futbolistas. Pero De Muner prefiere mirar el vaso medio lleno. "Aunque no nos guste, es la más importante. Te pones a punto para todo el torneo, vas conociendo a tus compañeros y es, por general, donde comienza a consolidarse el grupo", explicó.
De Muner que pide el apoyo de todos. "Al hincha le pido que nos acompañe como lo hace siempre la gente de San Martín; nosotros vamos a dejar la vida para lograr el sueño de todos", finalizó dejando en claro que hará de todo con tal de tomarse revancha y sacarse la espina.
En San Martín saben que no hay tiempo que perder. Llegar 10 puntos al inicio del torneo es la meta; por eso no dejan nada librado al azar. Ayer, el plantel trabajó en doble turno en el complejo Natalio Mirkin.
Bajo el mando del "profe" Osvaldo Conte y la atenta supervisión de Carlos Roldán, el plantel comenzó a trabajar fuerte en el aspecto físico. Hoy y mañana repetirá rutina. Mientras que el cuerpo técnico aún no decidió si el domingo será día libre o trabajarán en un solo turno. "Lo vamos a definir luego del entrenamiento del sábado", explicó Conte.
Unos llegan, otros se van, en medio del trabajo
Para la práctica de hoy, esperan la llegada de Carlos Javier López defensor central que viene de jugar en el Deportivo Anzoategui de Venezuela, quien será el undécimo refuerzo.
En tanto, Daniel Carrasco casi con seguridad no continuará jugando en el club. "No llegamos a un acuerdo con su representante y nosotros ya incorporamos jugadores en su posición. Quizás se vaya a préstamo por un año, a otro club", explicó el vice segundo Roberto Sagra, que dejó en claro que no tendrán problemas con el tema inhibición. "Con la mayoría de los jugadores que se fueron arreglamos una forma de pago. Hay otros que no aceptaron nuestra propuesta pero estoy seguro que vamos a solucionar ese problema. No vamos a caer en la inhibición. Es una situación difícil, pero la vamos a afrontar". Manos a la obra.
