El defensor está cumpliendo su sueño de jugar al fútbol de manera profesional y en el club de sus am
Lautaro Geminiani es de las variantes más importantes que ha encontrado el entrenador Diego Osella en los relevos de Patronato. El joven tuvo que sufrir el desarraigo familiar y durante la adolescencia vivió en Buenos Aires, donde vistió la casaca de Boca Juniors y Quilmes. La temporada pasada volvió al club de sus amores, para integrarse al plantel profesional.
En su segundo año en primera encontró un lugar, que parece no querer soltar. Ayer el marcador de punta aprovechó el día de licencia y visitó la redacción de EL DIARIO.
-¿Se disfruta este momento?
-Si, estoy contento con la oportunidad que me dio Diego (Osella), por el trabajo que se hizo durante los últimos fines de semana donde logramos dos triunfos. Muy feliz con lo individual porque me salieron las cosas y sé que con un poco de continuidad voy a lograr tener más aire y más piernas para poder soltarme.
-Con estas dos victorias, ¿lograron ahuyentar los fantasmas?
-Si, le dimos tranquilidad al cuerpo técnico y a nosotros, nos debíamos eso. Tuvimos una charla con mis compañeros antes del partido en Junín para meternos en la cabeza que podíamos dar mucho más. Con el sacrificio y el orden que siempre hubo, y corriendo todos juntos sabíamos que podíamos sacar esto adelante.
-Todos los encuentros parecen complicados.
-Planteamos los partidos en la semana, el entrenador se mete mucho en el rival y mediante videos y trabajos tácticos, más buenos minutos de fútbol sabemos que llegamos bien preparados y somos un equipo duro. Nosotros con orden y sacrificio tenemos que mantener el arco en cero, sabiendo que tenemos jugadores con capacidad para marcar en cualquier momento.
-¿Fue especial el partido del domingo ante Talleres?
-Si, siempre había jugado afuera. Ahora tuve la oportunidad de hacerlo en casa, en el lugar del cual uno es hincha y la verdad que hubo mucha gente que cuando estuve en Buenos Aires (Boca Juniors y Quilmes) y estando acá siempre me bancó, me ayudó en lo económico y en otras cosas, y que ellos fueran a verme me hizo muy feliz. Era algo que estaba buscando hace mucho tiempo, ser jugador profesional.
¿Cuál es tu secreto para haber llegado a jugar en primera?
-Mucho sacrificio, esfuerzo. Me tocó de muy chico irme a jugar afuera. Siempre con el apoyo de mi familia. Cuando uno sueña con jugar al fútbol y poder vivir de esto es muy lindo y el sacrificio es valorable. Estando lejos aprendí mucho, las experiencias en los clubes de Buenos Aires me ayudaron para que hoy en día pueda seguir dentro de una cancha. Una vez que me integré al plantel profesional de Patronato trabajé todas las semanas para tener una oportunidad y demostrar lo que puedo dar. Tengo que ir paso a paso para seguir creciendo.
-¿Sentís como propio el crecimiento que está teniendo la institución?
-Si, todo lo que está pasando en el club me pone muy contento. Hay muchos chicos con condiciones que antes se tenían que ir a probar afuera porque no tenían oportunidades. Ahora con el club en este nivel, metiéndoles muchas fichas a las inferiores, con comodidad para poder trabajar, es otra cosa.
-Son varios los chicos de inferiores que están teniendo chances. ¿Se habla de esto en el grupo de jóvenes?
-Hablamos y nos ayudamos mucho. Convivimos gran parte del tiempo, somos amigos. El consejo y el día a día del grupo es muy bueno. Al ver que alguno está jugando le da fuerzas al resto para seguir trabajando y luchando para encontrar un lugar.
-¿Soñás con seguir dentro de los once y que el equipo siga ganando?
-Gracias a Díos en los cuatro partidos que estuve pudimos ganar. Así que si sigo en el once inicial sería muy lindo poder ganar ante Unión y prendernos en la lucha de arriba.
-Fue importante que no trajeran otro refuerzo en la posición donde te desenvolvés.
-Diego (Osella) me dio su apoyo al principio del semestre, diciéndome que no iba a traer otro lateral por derecha así yo podía competir con Gaby (Graciani). A uno eso le dio confianza para trabajar y competir sanamente.
-¿Cómo es la relación con Gabriel Graciani?
-Siempre fue muy buena. Antes de que me vaya a Buenos Aires lo seguía mucho, él jugaba en el plantel del Argentino y yo en inferiores. Fue técnico mío, siempre tuvo la mejor de las ondas. Siempre hay bromas y está el apoyo cuando uno juega. Lo aprecio mucho.