Hugo Prieto, autor del primer gol en la victoria antoniana sobre el expreso tucumano, ponderó el buen rendimiento que tuvo el equipo.
El santo disfrutó de un anhelado y merecido triunfo ante un rival que siempre lo complicó. Esta vez, Juventud no dejó dudas, con autoridad y firmeza le arrebató tres puntos fundamentales a San Jorge, rival directo en la lucha por la clasificación. El equipo de Lerma y San Luis exhibió su mejor versión 2014, la cual solventó con un buen rendimiento colectivo.
Una de las piezas clave de la victoria fue la gran labor que realizó Hugo Prieto, autor del primero gol antoniano. Se movió por todo el frente de ataque y cada vez que recibió la pelota complicó a la defensa del expreso tucumano. Su tenacidad y velocidad fue un verdadero dolor de cabeza para el rival.
Prieto recuperó la memoria y volvió a ser aquel delantero incisivo que tanto necesita el santo.
“Se jugó bien a pesar del estado del campo de juego y le ganamos a un rival directo en la clasificación. Estoy contento más que nada por eso”, destacó Prieto.
La definición del primer festejo santo fue exquisito; Hugo desbordó por derecha, sacó un potente remate que sorprendió a todos, en especial al arquero de San Jorge, y la clavó sobre palo derecho.
Sincero y con humildad Prieto explicó la acción previa al gol: “Quise patear a donde estaba ubicado el arquero porque en la jugada anterior lo reté a Liva diciéndole que pateé los centros fuertes porque llegábamos con gente al primer palo. Pensé que Liva iba a estar ahí y rematé fuerte, el arquero dio un paso hacia adelante adivinando la jugada y la pelota se metió casi en el ángulo del segundo palo”, dijo con lujo y detalle.
El dar un paso certero hacia la clasificación, incrementó la confianza y esperanza de lograr el primero objetivo. “Arrancamos muy bien, estábamos esperando esto porque el grupo lo merece. La espera se hizo muy larga, se dijeron muchas cosas cuando no ganamos los amistosos que jugamos en el verano”, recordó Prieto y agregó: “El grupo está bien, hoy (por ayer) mostramos actitud y siempre intentamos jugar, por eso nos llevamos la victoria”.
La diferencia con respecto al equipo que dejó muchas dudas el año pasado estuvo “en el convencimiento más que nada. Seguimos siendo casi los mismos. Fue actitud, si seguimos con estas ganas vamos a ganar mucho más de lo que vamos a perder”, afirmó el delantero.
La persistencia fue una de las causas que le devolvió a Prieto la titularidad. “Le venia diciendo al técnico que me sentía bien, hice una buena pretemporada y las lesiones quedaron atrás. Ojalá que se me siga abriendo el arco y que sirva para el equipo sume”, concluyó el atacante, quien dejó el campo de juego exhausto.
Otro jugador que vivió una tarde-noche especial fue Daniel Liva, quien tuvo su mejor desempeño desde que llegó a Juventud. “Por suerte se me dieron las cosas, gracias a la confianza del técnico pude hacer un buen partido. Lo importante es que se ganó la primera final que nos acerca más a la clasificación”, expresó con satisfacción Liva.
El volante santo no pudo ponerle el broche de oro a su rendimiento, ya que no estuvo fino en los últimos metros: “Estoy mal para definir, pero lo importante es que se ganó”, cerró.