Tras la derrota de Independiente Rivadavia, un grupo de hinchas protagonizó incidentes que trataron de ser controlados por la Policía de Mendoza.
Después de la derrota de Independiente Rivadavia hubo corridas y disparos de balas de goma en las inmediaciones del estadio Bautista Gargantini.
Un grupo de hinchas de la Lepra protagonizó incidentes detrás de la tribuna Sur y la Policía de Mendoza intentó controlar la situación disparando balas de goma y tratando de que los simpatizantes se desplazaran hacia la calle Bolugne Sur Mer, lejos de donde se estaba desarrollando el conflicto.