García y Machín recibieron ofertas de varios equipos, incluso clubes del exterior; la deuda que tiene Instituto con ellos impide su retención, aunque la prioridad de los jugadores es continuar en Alta Córdoba. En enero, tienen una opción de rescisión.
Esta o la otra semana será clave para José Luis García y Gastón Machín. Ambos jugadores son sondeados por varios equipos, incluso un "grande" de Chile puso el ojo en uno de ellos. Aquí te explico la situación de los dos, que por cierto son muy similares.
"Pipi" García, el más accesible. El zurdo no quiere otra cosa que jugar en Instituto. Siempre deseó vestir esta camiseta y residir en la ciudad de Córdoba. Está a gusto desde que arribó.
El problema -obviamente- es originado por la deuda que tiene Instituto para con él (tres meses más alquileres). Si bien días atrás, en un dialogo informal, expresó que el dinero no es un obstáculo, la deuda se intensificaría si no pone alguna traba.
Sarmiento de Junín, Defensa y Justicia, Godoy Cruz, Ferro y un equipo chileno que milita la máxima categoría pusieron los ojos en él. Sin embargo, como detallé anteriormente, el deseo del jugador es permanecer en el club. Por eso, esta semana o en el arranque de la próxima los directivos quedaron en dar una solución de pago que, de ser así, jugará hasta diciembre del 2015 (vence su contrato). Es más, su interés de quedarse en Alta Córdoba es muy grande, al punto que si hay una solución extendería su contrato hasta junio del 2016.
Gastón Machín. Su situación es muy similar a la de Pipi. Se siente cómodo en el club, en Córdoba, pero el problema radica por el dinero. Posee la misma deuda y dos equipos de Primera (uno es Argentinos Juniors y el otro subió hace unos días) lo quieren como refuerzo.
Otro punto fuerte por remarcar, es que tanto Pipi García como Machín tienen una opción de rescisión en enero.
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