Federal A - SAN MARTÍN (TUCUMAN)

Cero chamuyo

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Lejos del uso del cassette clásico de los entrenadores, Tempesta llegó a Tucumán sabiendo que puede dirigir 4, 10, 20 o 50 partidos al Santo, dependiendo de los resultados. Una primera impresión del DT del Santo para el Federal A.

Voy a ser sincero. El día que me presenté ante Darío Tempesta tras un entrenamiento, esperaba otra respuesta de él. Cansado de los DT chamuyeros que llegaron en los últimos años, esperaba el mismo verso de todos.

Pero no. Me sorprendí gratamente. No escuché ni una frase hecha. Con mi compañero Abel Herrera hablamos más de 20 minutos con el entrenador y creo que los dos nos sorprendimos para bien.

"Vengo al Barcelona del Norte", llegó a decir uno de los DT más vendehumo que pasó por nuestra institución. "Vengo con un proyecto a largo plazo, quiero trabajar con las inferiores", esbozó otro. "Mi equipo va a ganar, golear y gustar", repetía y repetía en su presentación uno que, a la postre, nos mandó al descenso.

Tempesta llegó y dijo lo que pensaba y sigue pensando. "Yo vengo por este torneo, pero sé que si pierdo 4 partidos seguidos me tendré que ir. Este club tiene que salir de acá y los proyectos a largo plazo no existen", se sinceró. Clarito. El entrenador sabe que en el mundo del fútbol mandan los resultados y que San Martín, ahora más que nunca, no es la excepción.

Tampoco buscó cautivarnos al hablar de la hinchada. Él sabe que la banda del Santo es incondicional, pero no lo repitió una y mil veces como sus antecesores. Lo que busca Tempesta es que su equipo contagie a la hinchada. Con juego, pero sobre todo, con buenos resultados. Porque si jugás bien y no ganás, no sirve. Los merecimientos no existen en este torneo. Y el DT sabe que, si su equipo juega bien y no obtiene los 3 puntos, no podrá llorar como lo hizo un entrenador que pasó hace muy poquito por el club del cual dice ser hincha.

Yo no sé cómo juegan los equipos de Tempesta. Pude ver los clásicos de pretemporada pero ese no es el equipo que él va a parar durante el torneo. No sé qué sistema va a elegir ni qué jugadores va a utilizar. Pero sé que el tipo vino a laburar, que no se casa con ningún jugador y eso me gusta, además de que es respetuoso con los medios, con la gente, y sobre todo con los jugadores y dirigentes, quienes así lo indicaron.

Más allá de los resultados deportivos que consiga San Martín en este torneo, me gusta saber que el que va a conducir el barco tiene los pies sobre la tierra. Quizá después sea el primero en criticar su juego o la inclusión o no de algún jugador. Pero, desde ya, vaya mi respeto para el señor Tempesta, que vino a Tucumán a trabajar y a sacarnos la costumbre de escuchar chamuyos.