Pablo Jiménez se rompió los ligamentos y estará muchos meses afuera de las canchas, pero Unión Aconquija no decidió aún si buscará un reemplazante para el defensor.
Es que por reglamento, ante una lesión de esta magnitud se puede agregar un jugador a la lista de buena fe para ser habilitado. Los trámites no son sencillos, pero presentando todo en tiempo y forma, acreditando la gravedad de la lesión sufrida por el jugador en cuestión, se abre de forma automática la posibilidad de inscribir un nombre más.
Jiménez jugó todo el torneo pasado como lateral derecho, y al comienzo de este campeonato el entrenador Salvador Mónaco pidió otra alternativa para la posición, por lo cual llegó Lucas Fernández. La lógica indica que Jiménez debería ser reemplazado, aunque eso dependerá de la dirigencia de Unión Aconquija.
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