Luego de la polémica en la práctica del Decano, los protagonistas dieron más precisiones sobre lo sucedido: ¿Cómo nació el conflicto y cómo seguirá?
Este miércoles, en el entrenamiento de Atlético Paraná, se cruzaron a trompadas el DT Edgardo Cervilla y el jefe de prensa del propio club, Dario Albertini.
Según el propio Albertini y otros periodistas partidarios, Cervilla le pidió que se retirase de la práctica, ya que de lo contrario no seguiría con la jornada, argumentando no estar de acuerdo con ciertos comentarios expresados en "El Diario" de Paraná, medio en el cual trabaja Albertini.
Luego de un duro intercambio de acusaciones e insultos, Cervilla y Albertini se agarraron a trompadas a pesar de los intentos por separarlos, de parte de los presentes, colaboradores del DT, periodistas, entre otros.
Cervilla respondió, admitiendo todo lo acontecido y asegurando que Albertini venía criticando desmesuradamente su labor a cargo del Decano. Además, desmintió haber sido el que provocase el enfrentamiento físico y afirmó que no denunciará a al periodista implicado.
Por su parte, el dirigente David Cáceres, consultado al respecto, consideró que "esta situación no empaña a la institución y conociendo a las partes involucradas en el hecho esto, tarde o temprano, iba a suceder (...) no nos sorprende porque siempre tuvieron una relación bastante tensa".
"Vamos a ayudar para limar esas asperezas y poder reponer su relación, más allá del aprecio que tenemos por Darío y que nos une. Pero no queremos dramatizar, ni empeorar la situación mal llamada crisis, porque nosotros no lo tomamos así, ya que cuatro derrotas después de todos los logros que tuvimos me parece que no es una crisis", dijo Cáceres.
"Son dos personas que le dieron mucho al club y me parece que tirando para el mismo lado va a ser más productivos para solucionar estas cuestiones. Las instituciones están por encima de las personas, y ellos son lo suficientemente adultos y maduros, y quieren mucho al club para afectarlo", concluyó el dirigente.