El técnico de Juventud fue autocrítico con el flojo rendimiento del equipo, tras igualar con San Martín de Tucumán.
Esta vez el santo no fue el de la devoción de Alberto Pascutti. Juventud Antoniana dejó escapar la gran posibilidad de quedar a un pasito de la punta tras igualar con San Martín de Tucumán 1 a 1.
El santo no estuvo a la altura de las exigencias, tampoco quiere decir que fue un desastre, pero sufrió el desorden y le faltó peso ofensivo.
Pascutti, calmo y autocrítico por el desempeño de su equipo, reconoció: "Más que nada en el segundo tiempo nos desordenamos mucho y cuando un equipo lo hace, más allá de la impaciencia, no juega bien y si no jugamos bien no ganamos".
El golpe por golpe le jugó en contra a Juventud; apenas se puso en ventaja, San Martín lo igualó y sintió el impacto, se nubló y se acrecentó la ansiedad. "Hacemos el gol y nos empatan muy rápido, no nos permitió cerrarlo. Terminamos sufriendo el partido", opinó el Beto Pascutti.
Una de las apuestas del técnico santo en ofensiva fue Quinteros, quien tuvo una aceptable labor, pero está claro que no tenía demasiadas opciones por lesiones y sanciones. Y esto se sintió.
"Joaquín (Quinteros) hizo un buen partido, después no tenía más para poner, él estaba muy cansado porque viene de una inactividad importante, terminé poniendo un chico (Marcelo Albornoz) que jugó el martes en la local", aclaró.
Si bien el resultado no fue el esperado, el Beto trató de ponerle paños fríos a la situación: "No hay que meter tanta ansiedad, falta 21 puntos, todos los equipos empatan o pierden, no hay ninguno que gane todos los partidos. Para nosotros fue el partido 13 de local, ganamos 10 y empatamos 3, tampoco es una cosa para volverse loco". Por momentos Juventud estuvo en riesgo de quedarse con la manos vacías. "Se vio sobre final a ellos conformándose con el empate, si lo hubiera ido a buscar lo ganaban porque nosotros no estábamos bien", confesó .
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