El entrenador Iván Delfino y el arquero Sebastián Bértoli coincidieron en que podrán lograr el ascenso el próximo domingo, en el Grella. Ambos reconocieron sentir "mucha bronca e impotencia" por cómo se dio el 3 a 1 en contra ante Santamarina.
Atónitos, molestos, incrédulos, con sed de revancha y confiados en poder dar vuelta la historia. Los jugadores de Patronato sabían que habían jugado un buen partido en Tandil, pero que cometieron errores defensivos que le costaron más que caro.
Fue un fuerte cachetazo que sufrió de cara al partido más importante de su historia. No obstante, en el plantel Santo la fe está intacta y están seguros en que podrán revertir la serie y celebrar el ascenso a la Primera División el próximo domingo, ante su gente, en el estadio Presbítero Bartolomé Grella.
Anoche, tras perder 3 a 1 contra Santamarina en el partido de ida de la final del Reducido, los futbolistas del Negro se retiraban del vestuario visitante del estadio Municipal cuando se detuvieron a dialogar con la prensa paranaense.
"Es un equipo que encontró una ráfaga a lo último. Fueron más errores nuestros que aciertos de ellos. Tengo mucha impotencia", dijo el entrenador Iván Delfino, quien repitió "cometimos errores y esto es practicidad".
Sin embargo, el sunchalense se mostró optimista para la revancha: "hicimos un buen partido y lo vamos a dar vuelta. Estos partidos no son 180 minutos, son ráfagas; nosotros tuvimos la nuestra y la dejamos pasar, mientras que ellos aprovecharon la suya".
LA BRONCA DEL CAPITÁN. "Es muy injusto. No sé si hubo algún partido en el campeonato que merecíamos ganar más que éste. Se manejó la pelota, tuvimos las situaciones más clara, pero ellos fueron más eficaces. Somos mucho más equipo y lo vamos a dar vuelta", sostuvo firmemente Sebastián Bértoli, quien continuó analizando: "Tenemos más urgencias que otras veces, pero el equipo está bien. Erramos muchas situaciones, ellos se encontraron con el segundo gol y se cerraron bien. Después aprovecharon una pelota parada".
"Cuando mejor estábamos nos hicieron el segundo gol con una corajeada de Mariano González –prosiguió-. Ellos se cerraron bien y sabemos que tienen buenos pateadores".
Por último, el jugador más importante de la historia Rojinegra recordó lo que sucedió hace cinco años y medio, cuando en las semifinales del Torneo Argentino A también cayeron derrotados 3 a 1 en el encuentro de ida y en la revancha pudieron festejar.
"Tenemos que hacer lo mismo que contra Cipolletti, es un lindo deja vu. Lo vamos a dar vuelta", cerró en diálogo con La Fiesta del Fútbol de Radio Del Plata Paraná.
ADEMÁS. Walter Andrade, otro de los referentes, también dio su opinión sobre el cotejo: "generamos muchas oportunidades y cometimos errores en defensa. Nos hicieron dos goles de pelota parada y eso nos costó caro".
"Así como vinimos a ser protagonistas y buscamos el arco en todo momento, allá, en nuestra casa, seguramente lo vamos a dar vuelta –remarcó el Negro-. Estamos intactos, éste fue un cachetazo del que nos repondremos".
Por su parte, Diego Martínez sostuvo que "todavía tenemos 95 minutos en poder dar vuelta el partido. Va a ser difícil pero confiamos en nosotros mismos, que es un arma muy importante".
DESDE LA OTRA VEREDA. Por el otro lado, el director técnico de Santamarina, Gustavo Coleoni, advirtió que más allá del triunfo "todavía no ganamos nada. Ellos tienen buenos delanteros, la mejor defensa y un buen juego colectivo. Hoy (por ayer), los detalles fueron a favor nuestro".
Además, el Sapito reconoció que "en el primer tiempo encontramos el gol, pero sin ser más Patronato nos superó. En el segundo lo controlamos y no patearon al arco. Tuvimos huevos, embocamos los cambios y ganamos bien".
