Banfield va a visitar a Independiente Rivadavia en Mendoza el domingo sabiendo que los puntos perdidos como local, los tiene que reponer fuera de casa. El entrenador aguarda por las evoluciones de Pablo Santillo y Marcelo Bustamante y la vuelta a la titularidad de Andrés Silvera. El conjunto conducido por Daniel Garnero viene de una mala racha en este campeonato. El sábado no la pudo cortar ante Patronato de Paraná como local, aunque hizo méritos, generó situaciones, pero falló en la definición. Ahora viene un duro escollo, Independiente Rivadavia, en Mendoza, equipo que se hace fuerte de local, venció a Huracán sin merecerlo y es uno de los animadores del torneo. Este cotejo se jugará el domingo, en principio por la tarde aunque se terminará de confirmar. La buena noticia es que tras varios meses de recuperación y minutos ingresando en los segundos tiempos, Roberto Brum volvió a la titularidad en la mitad de la cancha junto a Cristian Leiva. Que se mejoró en la faz ofensiva, pese a la mala suerte de Gustavo Toledo que tuvo que salir en el primer tiempo. Galarza y Noguera no pasaron demasiados sofocones al igual que Caffa, mas allá de algún contragolpe. Que se generó, se fue de mayor a menor, pero se extrañó a Andrés Silvera, que si bien no pasa por su mejor momento, es un arma fundamental, junto con Andrés Chávez en el ataque. Parece que el “Cuqui” podrá volver para el viaje hacia Mendoza, y se aguarda por Pablo Santillo que venía aquejando un desgarro y Marcelo Bustamante, con inconvenientes en la rodilla. Todavía no se sabe cuales serán los cambios que proponga el entrenador que aun no consiguió fortalecer al lateral por derecha, el volante por izquierda y encontrar un juego colectivo convincente. El viernes firmó su primer contrato el juvenil Fabio Noguera. Además, vendrían un juicio de Ricardo La Volpe por cheques que no pudo cobrar durante su estadía en el club, mas los despidos de varios empleados de la sede y el predio de Luís Guillón, como factores del orden institucional.
