El viernes jugará la ida. Recibirá a Defensores de Belgrano, de Villa Ramallo, sin público. La vuelta será el martes a las 15. "La motivación fue en crecimiento", dijo Abaurre.
"Ha sido una semana rara, porque una cosa es prepararse para enfrentar a un nuevo rival o una revancha y otra cosa es estar en la incertidumbre de qué iba a pasar", comentó Alejandro Abaurre, entrenador de Gutiérrez Sport Club, tras la novela que le tocó vivir a su equipo en los últimos días.
Con la certeza de que la cuarta etapa reválida contra Defensores de Villa Ramallo se jugará, el DT del Celeste comentó: "A la hora de trabajar hemos resuelto en el día a día al no tener certezas de cómo ni cuándo".
–Fin de la ansiedad...
–Sí, ahora está la motivación de poder jugarlo y si nos toca pasar, en buena hora, y si no, quedar fuera jugando y no en un escritorio.
–¿Cuánto perjudicó a Gutiérrez todo esto?
–El fútbol son momentos. El partido para nosotros era ese día. Se preparó todo, se trabajó con el envión anímico que traíamos. Teníamos motivaciones extra para jugar ese partido y ese momento es irrepetible. Pero la motivación sigue estando. Hay que prepararse para un partido nuevo, y buscar llegar otra vez a un momento similar y hacer lo que teníamos en mente el día que se suspendió.
–¿Podés rescatar algo positivo?
–Hubo incertidumbre y algo de tristeza de pensar que podíamos quedar afuera por todo lo que se comentaba, pero cuando escuchábamos que había chances de jugarlo la motivación fue en crecimiento otra vez y sobre todo sabiendo que dependemos de nosotros. Si uno puede rescatar algo positivo de todo esto es que tuvimos la posibilidad de recuperarnos de la fatiga que traíamos de un trajín importante. Yo quería jugarlo ese día, porque veníamos con un envión importante, y ahora tenemos que tratar de repetir este momento.
–¿Es este el torneo más raro que te ha tocado dirigir por todo los que les pasó en el camino?
–Ha sido un torneo raro en líneas generales. Nos han pasado muchas cosas en el camino. Pero nos vemos en un momento importante. Hoy es fácil decir que esto es lo que queríamos desde un principio, porque ya tenemos el resultado puesto, pero nosotros siempre trabajamos pensando en esto. No lo manifestamos porque hay que ser cautos, porque dentro de los objetivos siempre hay prioridades. Teníamos que mantener la categoría, pero para eso teníamos que terminar primeros y sabíamos que eso nos clasificaba y nos permitía jugar por cosas más importantes, y eso es lo que fue pasando.
–¿Fueron subestimados?
–Hay equipos que tienen historia en el torneo, en el fútbol. Gutiérrez está haciendo su historia. Puede pasar que uno lo mire un poco subestimándolo porque es nuevo. Es difícil jugar contra un equipo así, porque es como cuando te toca jugar contra un rival que te pone suplentes. Quieras o no, y aunque estés atento a todo, sabés que son suplentes y pensás que el partido es más accesible, y dejás de pensar y tener la atención que te genera jugar contra equipos más importantes. Para nosotros el efecto es al revés, porque el jugador está más atento, se preocupa más, sabe que si deja afuera a un rival de esas características desde lo psicológico tiene más fuerza, Y es lo que ha ido pasando con nosotros. No digo que nos ninguneen, pero sí que puede haber una pequeña indiferencia hacia a nosotros.