El delantero, que actualmente es el goleador de la Reserva y no tuvo participación en el primer equipo durante el semestre, podría dejar de pertenecer a Atlético a principios del 2018. Sin contrato profesional, el hermano de Nacho evalua la chance de seguir su carrera en otra institución, sea o no transferido por la Crema.
Alfredo Pussetto nació el 2 de octubre de 1998 en Cañada Rosquín, y al igual que su hermano Ignacio, desde muy chico llegó a Atlético para empezar a transitar el camino de futbolísta. Después de destacarse en las Inferiores afista, el 22 de junio del 2017 le llegó el momento del debut en Primera División. Fue ante Tigre en condición de visitante, con la Crema ya descendida y bajo la tutela de Juan Manuel Llop. Cuatro días después tendría su bautismo de gol, ya que en la despedida de la máxima categoría convirtió en la derrota por 3 a 2 con Sarmiento de Junín. Para el pibe, más allá de la caída, el día será inolvidable, por que además era el inicio de una carrera que parecía iba en ascenso.
Sin embargo, el primer semestre de la temporada 2017/18 en la Primera "B" Nacional no tuvo esa continuidad que Pussetto tenía en su mente. Una lesión a principios de la pretemporada, sumado a un interés de Godoy Cruz que incluso lo marginó de algunos entrenamientos, llevó a que quede relegado en las preferencias de Lucas Bovaglio, por lo que debió bajar a Reserva para buscar continuidad y desde allí empezar a luchar por una chance. El esfuerzo estuvo, los goles acompañaron, pero la chance, quizás lógicamente, no apareció. El buen cierre de año de Alfredo coincidió con el mejor momento del primer equipo, por lo que un lugar entre los 18 nunca estuvo, y esto sumado a otras cuestiones ponen en riesgo la continuidad del juvenil en la Crema para el segundo año.
Lo primero que hay que aclarar es que Pussetto no tiene contrato con el club, y al ser mayor de 18 años puede "salirse" sin necesidad de una anuencia por parte del club. Desde el entorno del jugador afirman que esa no es la intención, pero también reconocen que la falta de posibilidades, sumado a que no se firmó un contrato que supuestamente había sido prometido en julio, inclinan la balanza para que el delantero no se presente al inicio de la pretemporada previsto para el 4 de enero.
Ricardo Castro, presidente de la subcomisión de fútbol, dejó en claro la postura de Atlético: "No creo que lo perdamos, el papá (NdR: Gustavo) se ha portado muy bien siempre con nosotros, nos ha dado siempre la última oportunidad en el caso de Ignacio en cuanto a que club ir, el porcentaje de la venta... siempre jugó el partido a favor de Atlético. En el caso de Alfredo pasa lo mismo. Cuando empezamos la pretemporada y podía tener su chance se lesionó y estuvo parado mucho tiempo. Volvió y sale la oferta por parte de su representante para ir a Godoy Cruz. Ahí empezamos a 'que me voy, que me quedo', y eso al jugador le hace muy mal, más teniendo en cuenta que es un pibe. Vamos a volver a hablar con su representante, volveremos a hablar con su papá, vamos a ver que quiere hacer Alfredo, que es lo fundamental. Yo la voy a pelear para que se quede, él no tiene contrato pero no creo que tengamos un conflicto porque hay predisposición de solucionarlo".
Los próximos días serán claves para definir que es lo que ocurrirá con el actual goleador de la Reserva que comanda Lito Bottaniz. Será cuestión de reuniones con varios frentes abiertos: la posibilidad de un contrato, de una transferencia o de una salida sin beneficios para Atlético.
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