El conjunto de Lincoln que dirige Schiavi viene de perder los últimos tres partidos de manera consecutiva. Ganar es lo único que le sirve.
ambién ayer, pero por la tarde, el conjunto que dirige Fabio Schiavi entrenó en su estadio y hoy partirá en colectivo rumbo a la Patagonia para la final por el descenso.
El técnico quedó obligado a introducir variantes con respecto al último partido y no sólo por haber caído de local contra Deportivo Madryn.
El mediocampista Emanuel Tolosa llegó a la quinta amarilla el domingo pasado y no pisará el sintético de La Visera, mientras que Eric Veliz irá al banco de suplentes. El medio central esta vez será Esteban Castaño para enfrentar a Cipolletti.
Intentando ganar en el Alto Valle, dando lo que sería el gran golpe de la temporada, Rivadavia jugará con Agustín Starópoli; Emanuel Assandri, Carlos Quintero, Luciano Vargas, Lucas Macías; José Paradella, Castaño, Alejandro López, Brian Visser; Facundo Graziano y el goleador Hernán Altolaguirre.
En Lincoln, nadie desconoce lo complejo que es el panorama para no descender. Pero apuntan a que la presión de la gente sea un factor que termine cargando de responsabilidad a un rival todavía más urgido de mantenerse en el Federal A. Si los minutos se consumen con la paridad, se irá soltando.
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