Mauro Marrone cumplió el pasado viernes 200 partidos oficiales con la camiseta de Talleres. En diálogo con el sitio oficial, nuestro capitán contó sus sensaciones sobre su extensa trayectoria en el club y también habló del presente del equipó de Daniel Vicentín.
"Pepe" nació en Lanús el 23 de junio de 1986, tiene 31 años y desde muy chico defendió los colores de Talleres. Surgido de las divisiones inferiores del club, logró debutar en primera división en 2002 con 16 años y se mantuvo en el plantel hasta el 2009, cuando emigró a Almirante Brown; además del elenco del oeste, Marrone pasó por Blooming, Oriente Petrolero y Atlanta, para finalmente volver al club de sus amores en el año 2017. Lo une un lazo muy fuerte a nuestra institución, ya que su tío Gabriel formó parte de los planteles que obtuvieron los ascensos a Primera "B" en 1983 y 1986/87 y fue un baluarte importante, ocupando al igual que Mauro la posición de volante central.
En el encuentro disputado en Timote y Castro por la fecha 31 del torneo de Primera B Metropolitana entre Talleres y Tristán Suarez, Mauro Marrone vistió el manto albirrojo por vez número 200 en su carrera, ¡Qué cifra!
No satisfecho con semejante logro, "Pepe" consiguió hacer que todo fuera aún más de película cuando en la última jugada del partido, tomó la pelota y definió desde los 12 pasos para darle un valiosísimo triunfo a Talleres por 1 a 0.
¿Que sensaciones te dejó llegar a tu partido número 200 con la camiseta de Talleres?
Felicidad, Talleres es como mis viejos. Llegar a esta cantidad de 200 partidos me pone muy feliz.
¿Cómo viste al equipo en el partido ante Tristán Suárez?
Los primeros 25 minutos fueron muy buenos. Manejamos la pelota con mucha intensidad. El resto del partido lo fuimos a buscar pero ya con pocas ideas y llegadas mucho más forzadas. Gracias a Dios, al final tuvimos nuestro premio.
¿Qué se te cruzó por la cabeza cuando agarraste la pelota para patear el penal en el último minuto?
La tranquilidad de saber que tenemos un gran grupo que se merece estar más arriba en el torneo. No sé si campeones, pero si pelear el certamen hasta la última fecha. Con esa tranquilidad que me transmiten mis compañeros, sabía que no les podía fallar a ellos.
¿Sos de quedarte practicando penales en los entrenamientos?
En estos dos penales que me tocó patear, al llegar al vestuario les agradecí a Lucas Zeiden, Simari y Leguizamón, porque una o dos veces por semana jugamos a ver quien ataja y así practicamos con más seriedad. A Lucas lo tengo de hijo (risas).
Con un calendario apretado como ya es costumbre, no hubo tiempo para que festejen el triunfo en casa porque a la vuelta de la esquina tenían otro compromiso importante. Una dura parada los esperaba el día martes en Barracas. Finalmente fue empate 0 a 0. ¿Qué sensaciones te dejó el empate ante Barracas Central?
Fue un partido muy parejo, donde los dos nos estudiamos mucho. Ellos tuvieron una clara en el primer tiempo y nosotros una en el segundo. Nos controlamos el uno al otro sin hacer diferencias. Por eso empatamos.
¿Cómo ves a Talleres para la recta de final del campeonato?
Tuvimos una seguidilla negativa que nos dejó lejos de la punta. Pero a lo largo del torneo demostramos que nos plantamos en cualquier cancha con las mismas ganas e idea de atacar y ganar el partido. No sé si íbamos a salir campeones, todavía podemos hacer historia, por eso seguimos convencidos de lo que hacemos.
Por último, un mensaje que le quieras dejar al socio y simpatizante…
Agradecerles por el cariño que me brindan. Que sepan que este grupo tuvo y tiene un sentido de pertenencia muy grande con el club, a veces los resultados no son los que esperamos, pero este grupo no se va a volver a repetir nunca. Que sigan ayudando, que hay mucho por hacer todavía.